Un nuevo estudio liderado por M. Jimena Rodríguez, investigadora del IALP (actualmente realizando una estadía en el Space Telescope Science Institute), explora las etapas más tempranas de la formación de estrellas y cúmulos estelares en 19 galaxias cercanas, usando observaciones de los telescopios espaciales James Webb (JWST) y Hubble (HST).
¿Qué observaron?
Detectaron más de 1800 fuentes compactas que emiten luz en una longitud de onda muy particular (3,3 micrones, luz infrarroja no visible), asociada a moléculas orgánicas complejas llamadas hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAHs). Estas moléculas se excitan (y emiten luz) en regiones muy jóvenes de nebulosas con formación estelar, aún ocultas por el polvo interestelar.
¿Por qué es importante?
Estas regiones serían cúmulos estelares recién nacidos (conjuntos de estrellas relacionadas gravitatoriamente que nacen juntas dentro de las nebulosas), que todavía no pueden verse en luz visible.
Se estima que estos objetos tienen menos de 3 millones de años.
La cantidad detectada sugiere que, en muchos estudios anteriores, podríamos haber subestimado el número real de cúmulos jóvenes: ¡podrían ser hasta 8 veces más!
Este trabajo muestra el enorme potencial del JWST para revelar los procesos más tempranos de la formación estelar, antes ocultos por el polvo, y ayuda a entender cómo nacen las estrellas y los sistemas que las agrupan.